Jana Montes : aprendiendo a dar voz a su ambición

Sería lógico pensar que una jugadora de 15 años como Jana Montes Cabuja, la estrella emergente del pádel catalán, tendría una gran confianza en sí misma. Su padre es propietario de un club de pádel, su madre se pasó al pádel tras una lesión de tenis y la propia Jana se convirtió en profesional a los 13 años. Sin embargo, ha tardado mucho tiempo en manifestar su ambición de llegar a lo más alto.

En 2021 y con solo 13 años, fue la jugadora más joven del TAU Cerámica Albacete Challenger. Presentó discretamente una solicitud de tarjeta de visita y no podía creérselo cuando fue aceptada en el torneo.

"Todo sucedió muy rápido", recuerda. "En aquel momento, solo esperaba jugar algún día un partido del WPT. Y, de repente, me aceptan en el challenger. Aun así, no me lo tomé como algo dramático. En realidad no sabía lo que era la presión, pero recuerdo que tuve un dolor terrible en el estómago justo antes de empezar. Solo desapareció cuando empecé a jugar." Aunque ella y su entonces compañera quedaron eliminadas en la fase de preclasificación, su presencia en el TAU Cerámica Albacete marcó un récord: convertirse en la jugadora más joven en debutar en el World Padel Tour 2021 y pasar a ser profesional.

Pero entonces su prometedora carrera se vio interrumpida. Justo después del Challenger de Albacete se torció los dos tobillos mientras jugaba. Mirando atrás, Jana cree que fue el peor momento de su carrera hasta ahora: no por la lesión en sí, sino por el miedo que sintió a que la recuperación fuera solo temporal y a que pudiera volver a ocurrir. Se le hacía difícil creer que en un futuro podría tener éxito como jugadora.

"Si Babolat puede creer en mí, ¿por qué yo no?"

En esos momentos difíciles, su relación con Babolat le ayudó a superar su actitud negativa hacia sí misma.

"No recuerdo el momento en que Babolat apareció en mi vida porque solo tenía 10 años cuando me ficharon. Pero llegó un momento en mi carrera en el que me di cuenta de algo esencial: si una gran marca cree en mí lo suficiente como para patrocinarme, ¿por qué no iba yo a creer en mí misma? Darme confianza en mí misma ha sido sin duda lo más importante que han hecho por mí".

¿Tenía Jana a alguien a quien admirar, que la inspirara en su decisión de dedicarse al deporte? "Me han hecho esta pregunta muchas veces", declara con una tímida sonrisa. "La verdad es que no, no admiro a nadie en especial. No puedo quedarme sentada viendo jugar al padel: ¡necesito jugar!".

De todos modos, dispone de pocos momentos de relax en su vida diaria. Tiene clase hasta las 5 de la tarde y entrenamiento nada más acabar. Aun así se las arregla para sacar algo de tiempo para estar con sus amigos, pero sin excederse, porque el pádel es su máxima prioridad. Ha jugado desde que tenía ocho años, así que solo ha conocido esta vida.

Dos tipos de presión

Un cambio de mentalidad tras su lesión de tobillo dio rápidos resultados en lo que resultó ser un 2022 repleto de éxitos: se proclamó campeona de España en su grupo de edad y fue coronada mejor jugadora de Cataluña. En 2023, pasó de la selección española sub-15 de Babolat a formar parte del equipo internacional Babolat, algo que cree que dará otro significativo impulso a su carrera. Ahora, con 15 años, el significado de la palabra presión está mucho más claro en su cabeza.

"Hay dos tipos de presión: la que te motiva a conseguir resultados, y la que ejercen sobre ti los demás: si tuviste muchas victorias en el pasado, lo que se espera de ti es que sigas ganando. Me concentro en mi propio juego y voy trabajando poco a poco para seguir avanzando".

Y por fin tiene la fuerza suficiente para expresar su sueño en voz alta: "Para mí, el éxito significa ganar: quiero llegar a ser la número 1".